sábado, 14 de febrero de 2009

El interminable caso de Benjamin Button


Aprovechando el asueto pre-electoral fui a ver El curioso caso de Benjamin Button con mis hijas adolescentes en un cine abarrotado de muchachos. Afortunadamente, se portaron bien, suelo temer a este tipo de público, y eso que la película es larga, casi tres horas, demasiado larga para mi gusto, tan larga que me hizo recordar la famosa frase de Woody Allen que una película no debe durar más de lo que dura la vejiga humana en llenarse.
No me pasa con todas las película largas, jamás me atrevería a tildar los dos primeros Padrinos de Francis Ford Coppola como demasiado largos, fueron perfectos, pero El curioso caso de Benjamin Button de David Fincher, basada en un relato de F. Scott Fitzgerald que narra la historia de un niño que nace con las características de un viejo y a medida que van pasando los años, se vuelve cada vez más joven; por más 13 Oscares que esté nominada, como a las dos horas, a medida que Brad Pitt se iba poniendo espectacularmente bello, se me hizo interminable. 
Los primeros años fueron encantadores, los del viejo-niño críado en un ancianato por una madre adoptiva negra quien recoge al recién nacido abandonado en la puerta de su casa por considerarlo tan desafortunado: "que hasta nació blanco".  Benjamín crece como un viejito más entre los viejitos: achacoso, débil, pero con la inocencia de un niño para quien todo es nuevo en la vida. Brad Pitt es convincente en esta primera parte de la película, emular a un niño le debió resultar fácil con la tropa de muchachitos que tiene con Angelina Jolie.
Comencé a sentir que la silla se volvía incómoda,  a chequear la hora en mi celular,  a buscar la última cotufa de la cajita; cuando Benjamin adulto se reencuentra con Daisy(Cate Blanchett), su amiga de infancia, y comienza la serie de encuentros y desencuentros románticos hasta que por fin coinciden en una edad física compatible, aunque ambos saben que esta compatibilidad no puede durar.  ¿Qué les puedo decir?  Cate Blanchett,  una de las mejores actrices de su generación, no da con el personaje de la joven bailarina, aunque se le ve más cómoda como la madura profesora de ballet, y a Brad Pitt como el Benjamin adulto ya no le resta mucho por actuar más que ser espectacular, y lo logra con creces:  no hubo close up del rubio actor cuarentón en el que no se oyera un suspiro general entre la audiencia femenina  y parte de la masculina. Sin embargo, el hermoso Benjamin careció del encanto del niño viejo. 
Salí del cine con la sensación de que esa película  la había visto antes, tenía muchas características similares a Forrest Gump de Robert Zemeckis: el protagonista narra su vida desde la infancia; el primer amor sólo logra darse tras muchos desencuentros; el sur de los Estados Unidos como escenario; énfasis en el momento histórico-cultural de cada escena. Luego descubrí que ambas películas comparten guionista: Eric Roth, nominado este año al Oscar como mejor guión-adaptación por El curioso caso de Benjamin Button, y ganador en 1994 por Forrest Gump. 
Pero Forrest Gump, tan vilipendiada por algunos corazón de piña que la consideran una cursilería Pop, es una película que he visto más de una vez sin dejarme de emocionar con momentos como: "corre, Forrest, corre" o el "Jeeeeenyyyy" en la multitudinaria protesta antiguerra frente al Obelisco de Washington. No siento que lo mismo me pueda pasar con El curioso caso de Benjamin Button, aunque no me arrepiento de haberla visto en cine: un close up de Brad Pitt en pantalla grande bien vale la pena una vejiga a punto de reventar.   

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Piki, que comica eres, jajaaja. Me hiciste reir.Estoy de acuerdo en todo lo que escribiste.
Yo tuve la suerte de ver la pelicula en un VIP.
Y las 3 horas pasaron sin darme cuenta, pues reclinada en esa gran butaca, cerraba los ojos y Brad Pitt estaba junto a mi. Soñar es gratis.
Gabi

Adriana Villanueva dijo...

Gabi, no tuve tu suerte, me tocó una sala en la que los resortes de la silla estaban vencidos y quedé con la espalda peor que Benjamin a los 12 años.

Anónimo dijo...

Insensible. Mira que gustarte más Brat Pitt viejo que joven y apuesto...